jueves, 16 de julio de 2009

Reciclaje de Residuos de Construcción y Demolición (RCD)

Tecnología.
Por Arq. Gustavo Di CostaConstruir y Decorar
Organizado por MacFarlane Consultancy, Eurocentro Patagonia y la Universidad de Palermo a través del CEDtyp (Centro de Estudios y Desarrollo de Tecnologías y Producción), se llevó a cabo el Seminario de Capacitación *Reciclaje de Residuos de Construcción y Demolición*. Como RCD se considera al material generado por la construcción y demolición de edificios e inclusive residuos de cascajo, tierra, asfalto, hormigón, madera y metal. En este curso se explicitaron las mejores prácticas y técnicas utilizadas en Europa, pero adaptadas a las situaciones específicas y necesidades de la Argentina.
La construcción parece un sector idóneo para fomentar el uso racional de residuos y subproductos industriales. Por una parte, consume grandes volúmenes de materias primas y, por otro, genera enormes cantidades de escombros procedentes de la demolición de edificios o de desperdicios de materiales provenientes de la construcción de una obra nueva o de reformas en viviendas y urbanizaciones. Poco a poco se va expandiendo el interés por utilizar residuos de construcción y demolición en las nuevas edificaciones, aliviándose así el problema ambiental que origina la eliminación de los mismos. Los Residuos de Construcción y Demolición (denominados RCD), también llamados residuos inertes y conocidos habitualmente como escombros, varían según se trate de nueva construcción, reforma o demolición. También va a depender de la actividad para la que se ha diseñado el edificio, así como la zona donde se haya realizado la obra y la edad de la misma, ya que los materiales una vez utilizados van sufriendo variaciones importantes en el tiempo.Se tratan de residuos constituidos básicamente por tierras y áridos mezclados, piedras, restos de hormigón, ladrillos, cristales, restos de pavimentos asfálticos, materiales refractarios, plásticos, yesos y maderas. La generación de los RCD ha aumentado como consecuencia del crecimiento urbanístico. Por ejemplo, el volumen de deshechos de demolición y construcción en España oscila entre los dos y tres kilogramos por habitante y día (tasa superior a la de la basura domiciliaria).Además, en España se producen anualmente unos 20 millones de metros cúbicos de este tipo de residuos, de los que no se recicla ni un 1%, y se vierte incontroladamente casi todo el resto. Por supuesto, la mala gestión de estos residuos le crea un grave problema a nuestro entorno, agravándose gradualmente y provocando un negativo impacto ambiental. En las últimas décadas la generación de los RCD ha sufrido un importante incremento, lo que dio lugar a que las distintas Administraciones Públicas (sobre todo las europeas) comenzaran a regular la gestión de este tipo de residuos. El reciclaje de los RCD supone un beneficio ambiental importante, ya que se traduce en un ahorro en la extracción de recursos naturales y en la disminución de residuos depositados en vertedero.
De manera esquemática, el proceso a seguir en una Planta de Tratamiento de RCD es el siguiente:
-Recepción del material bruto.
-Separación de Residuos Orgánicos y Tóxicos y Peligrosos (y su envío a vertedero o gestores autorizados, respectivamente).
-Acopio y reutilización de tierras de excavación aptas para su uso.
-Separación de maderas, plásticos cartones y férricos (reciclado)
-Tratamiento del material apto para el reciclado y su clasificación.
-Reutilización del material reciclado (áridos y restauraciones paisajísticas)
-Eliminación de los inertes tratados no aptos para el reciclado y sobrantes del reciclado no utilizado.